Medicina indígena tradicional maya

(Chiapas, México, 2023)

Simulación de un parto tradicional

“A través de cientos de años, los indios mayas Tzotziles

y Tzeltales hemos creado,

y en la actualidad seguimos

recreando, una medicina adecuada a nuestra forma

 de vivir y de pensar”.

 

En el mundo existen 300000 especies vegetales, México cuenta con 30000 y de estas, 15000 se encuentran en el estado de Chiapas. Esta diversidad, junto a las personas que habitan esta tierra, que se aferran con fuerza a sus costumbres y manera de vivir tradicionales, hacen de Chiapas (especialmente la Meseta Central) la región donde se practica con mayor intensidad la medicina indígena tradicional.

La utilización de plantas medicinales es muy rica debido a la variedad florística que en ella existe. Sólo en 10 municipios de esta Meseta Central, se encuentran 1600 especies de plantas medicinales.

 

Las 5 especialidades de la medicina indígena tradicional.

 

La medicina Tzotzil-Tzeltal es fruto de una experiencia milenaria en estrecho contacto con la naturaleza. Actualmente existen 5 especialidades.

 

- I´lol o Pulsador:

“Puedo abrirme paso al mundo invisible

y enfrentarme a él

para rescatar e akna del enfermo

que está perdida y prisionera.

El diagnóstico lo realizo mediante el pulso.

Cuando pulso siento una corriente de sangre

que va del corazón al pensamiento,

todo se sabe por la sangre, y yo oigo su voz, que me dice cuál es el mal del enfermo”.

 

- K´oponej witz o Rezador de los cerros:

“Soy el medico indígena que reza al espíritu de la tierra

en los cuatro puntos cardinales.

Cuando estoy en la montaña, el espíritu de los cerros me dice:

Si no me hablan, si no me piden,

no puedo darles su alimento;

aunque tengan milpa, les mando al viento para que la tire;

así no van a tener comida.

Si no me rezan

 va a haber enfermedad y problemas.

En cambio, si me vienen a rezar

y dejan algo en mi puerta,

con mucho gusto les doy lo que me piden”.

 

Los rezadores de los cerros son los médicos que conviven con los ángeles o espíritus de los cerros. Los cerros sagrados representan la vida y a la madre naturaleza y estos rezadores piden a la madre naturaleza que sea buena con las cosechas y que haya agua.

 

- Tzac´bak o Huesero:

“Trato las enfermedades de los huesos,

corrijo las zafaduras, las fracturas

y todos los males del esqueleto.

Sé tentar el lugar lastimado

para encontrar la enfermedad y curarla

con silbidos, yerbas, vendas y rezos”.

 

- Jve´t´ome o Partera:

“Soy partera indígena tradicional de mi paraje en Chenalhó…

Además de aligerar el parto,

sé curar enfermedades de la mujer,

mal de orina, calambres del embarazo, peligro de aborto,

menstruación dolorosa o irregular, hinchazón,

cuando la mujer no puede tener hijos

o que no le baja la leche después del parto,

caída de la matriz y hemorragia después del parto”.

 

La partería es una especialidad de la medicina maya que lleva existiendo cientos de años. Por medio de un don divino, las parteras saben cómo atender los partos, los cuidados durante la etapa de gestación y post-parto, y cómo usar plantas medicinales para curar enfermedades de la mama y el bebé.

En parto sucede en la casa tradicional indígena, en el hogar de la embarazada, estando presentes el marido y la partera. En el periodo del parto, la mujer se coloca de rodillas frente al marido, abrazándolo del cuello. El esposo, sentado en una silla, abraza a la parturienta de brazos y tórax, mientras que la partera, detrás de la madre, presiona suavemente el vientre hacia abajo y se prepara para recibir al niño. En caso de que se prolongue el parto se usan plantas medicinales para apurarlo. También se utilizan maniobras externas, ya sea a través de las manos de la partera o con las rodillas del marido que está en frente de su mujer. La madre puede parir de pie, hincada o abrazando al marido por el cuello.

Las parteras nunca ofrecen sus servicios. Cuando la mujer está segura de estar embarazada, ella y su marido van a ella para pedir sus servicios. A partir de ese momento, cuando la necesitan, la partera viene, no importa el mal tiempo ni la hora.

 

- Ac´vomol o Hierbero:

“Para curar a las gentes, corto en el monte las plantas medicinales,

ya sean hierbas o árboles.

Utilizo distintas clases de plantas según enfermedades:

frías o calientes, fuertes o débiles,

de niños y mujeres, de corto y largo tiempo…

Sé cuando utilizar toda la planta o una parte de ella.

Hay plantas que se hierben o se machacan crudas,

otras que se calientan en el comal

sólo se limpia a la persona con las plantas frescas.

También distingo cuando una planta es venenosa y no se le debe tomar.

Yo, como hierbero, tengo en mi cabeza todos los secretos de las plantas”.

 

El hierbero conoce todos los tipos de plantas medicinales y cómo deben usarse. Para cortar las plantas, realiza una ceremonia para pedir permiso a la Madre Tierra y disculparse. Algunas deben cortarse en la mañana y otras por la tarde o por la noche.

Una de las plantas medicinales es el tabaco silvestre, que debe ser machacado y sirve para ahuyentar a los malos espíritus y a algunos animales.

 

Recursos terapéuticos utilizados por los médicos indígenas.

 

Para los mayas Tzotziles y Tzeltales, la tierra y la lluvia poseen características sagradas. La cruz representa los cuatro puntos cardinales y la Ceiba, árbol sagrado del que se origina la vida. La Tierra es la madre de la vida universal, ella controla las fuerzas cósmicas; fuego, aire, lluvia, eclipses y temblores. La iglesia es un espacio sagrado y terapéutico, en el cual los médicos indígenas, por medio de rezos, limpia, quema de velas y copal, curan a los enfermos.

- Las velas: Con ellas se detienen los daños del alma y se libera el espíritu del enfermo. Todos los seres humanos tienen luz y su luz representa la vida. El número, tamaño y color de velas utilizado es distinto según la enfermedad que se trate de curar, pero siempre han de quemarse por completo, pues son el alimento de Dios y sus santos.

- La cruz: Hecha de pinabeto, es la representante de Dios en la tierra, importante para que haya acuerdo con él.

- El rezo: Los rezos se pueden realizar en cualquier lugar, donde perdió el alma el enfermo, o se adquirió la enfermedad; en el río, en el cerro, en el camino. También en las cuevas, en la iglesia o en la milpa.

- El incienso: El incienso o copal se quema en el Yabj ak´al (incensario), su humo es comida de Dios, como el maíz es nuestro alimento.

- Las flores: Las puntas de las ramas de ocote tierno se utilizan en el Altar. Cada rama representa a la persona o personas con las que se va a rezar y pedir por ellas. Las flores son también comida de Dios.

- El posh (bebida alcohólica local): Soplado sirve para que la gente esté contenta; fortalece a las personas y saca de sus almas los malos espíritus, que dañan y hacen sufrir.

- El refresco: Se limpia al enfermo con el refresco (al igual que con el posh) y se le ofrece a Dios regando un poco entre las velas, para que retire y tape el mal que tiene el enfermo.

 

Biopirateria.

 

La biopiratería hace referencia a la apropiación, robo o patente de recursos naturales (plantas, animales, minerales y humanos) y conocimientos indígenas, por parte de algunos investigadores, universidades, laboratorios, empresas farmacéuticas y gobiernos (especialmente de los países desarrollados), para su explotación comercial sin la autorización y reconocimiento de sus creadores o innovadores, ni compensación justa y proporcional a los beneficios que, en última instancia, se derivarán de estos recursos naturales y conocimientos colectivos.

La biopiratería es aún a día de hoy uno de los mayores enemigos de la medicina tradicional indígena. Financiada por universidades, gobiernos nacionales y extranjeros, laboratorios químicos y empresas farmacéuticas (siendo ellos los beneficiarios directos y exclusivos de su comercialización) se aprovecha de la pobreza y la falta de información en las comunidades indígenas para obtener información de ellas y enviar a laboratorios químicos, para que éstos extraigan las sustancias curativas y útiles de las plantas. Estas sustancias se venden a las empresas farmacéuticas, quienes hacen pruebas en animales y humanos, para fabricar y patentar medicamentos.

La biotecnología, la globalización y el neoliberalismo facilitaron la creación de las marcas y patentes en el mundo. Se amplió y justificó la explotación de un bien común, perjudicando a todos los enfermos del mundo, en especial a los más pobres.

Desde de la conquista, hasta los tiempos de ahora, los biopiratas siguen presentes en estas tierras. He aquí 2 ejemplos;

- Nicolas Monardes (Sevilla, España, 1493-1588): Médico traficante de conocimientos y plantas medicinales, los cuales eran obtenidos por los naturalistas (botánicos) a partir de la información que sustraían de los curanderos indígenas de América. Monardes compraba esclavos negros, quienes eran marcados a fuego con la M de Monardes y enviados a América para su intercambio por plantas medicinales, las cuales habían sido cosechadas por los mismos negros esclavos y los nativos de América.

– Brent Berlin: Etnobiólogo estadounidense. Al igual que muchos otros investigadores, se ha aprovechado de la pobreza y la falta de información en las comunidades indígenas para llevar a cabo sus proyectos, extrayendo los conocimientos que los pueblos indígenas poseen sobre la utilidad de plantas, animales, minerales y semillas para su explotación por parte de las farmacéuticas multinacionales.

 

Información recogida en el museo de la medicina maya de San Cristobal de las Casas.